El que la sigue la consigue (InterCopa) |
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Ese sería el lema de nuestro siguiente protagonista. Hoy toca hablar, con algo de retraso, del actual campeón de InterCopa.
Hoy sacamos la pluma, la estilográfica, y contaremos la increíble trayectoria de este equipo que nació para ganar. Sin duda alguna toca hablar del Real OPC, el cual está comandado por el gran Rizos. Éste es un manager exigente con los suyos, un manager que no deja momento de respiro alguno entre sus jugadores, un manager que saca lo mejor de cada uno de sus jugadores, un manager al que sólo le vale con ganar o ganar.
Hoy toca analizar la pasada edición de la InterCopa. El Real OPC es ya un casi habitual de estas finales, y es que el equipo belga ha estado ya presentes en 6 finales intercoperas, estableciendo así un récord de finales de InterCopas jugadas. Hace ya dos temporadas jugó su 5ª final (venía de haber ganado 2 y haber perdido las otras 2) por lo que era el momento del desempate. Ese desempate terminó con sabor amargo para ellos, ya que vería a otro compatriota levantar ese trofeo. El Real OPC se quedó con la espina clavada y volvería más fuerte que nunca a la siguiente temporada. Tras varios increíbles, y algunos ajustados, choques volvería a estar presente en la final de la 2ª máxima competición internacional. En esta ocasión vimos una final vibrante cargada de emoción. El Real OPC venía dispuesto a llevarse el título y terminaría la 1ª mitad dominando el marcador. Ese 0-1 le daba, de momento, la copa. Minutos más tarde la afición belga volvería a enloquecer. Ese 2º tanto hacía que éstos comenzasen a celebrar el trofeo. Tras varios minutos de dudas y relajación, su rival lograría recortar distancias en el marcador. Ese 1-2 ponía en aprieto a los belgas y ahora éstos comenzaban a fallar en los pases más decisivos. Gracias a ese desajuste de su rival, el punta F.C. pondría las tablas en el marcador cuando quedaba poco para la conclusión del choque. Tras este 2-2 es cuando vimos el carácter verdadero de este conjunto belga. Con la moral comida por el adversario y con el tiempo llegando a su fin, el Real OPC sacó fuerzas de flaqueza y volvería a buscar puerta. Cuando tan sólo quedaban 5 minutos para la conclusión del choque, aparecería el salvador del equipo, Justiniano Ross (El Justin pa los amigos) para poner ese 2-3 que volvería a poner el estadio patas arriba y dejaría la copa en el lado belga.
Su 3er trofeo internacional de InterCopa es ya una realidad. Ahora, en esta temporada, volvemos a tener a este conjunto luchando por llegar a su 7ª final. ¿Será capaz de seguir escribiendo su futuro con letras de oro? Quédate con nosotros y vive la emoción de la InterCopa domingo a domingo. |
D. Rivas |
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